Querid@ amig@,
Soy Manuel Herranz, presidente de HUM – Movimiento de Unidad Humana. (www.human-unity.org) y de todo corazón te invito a participar en un evento global a celebrarse en otoño de 2020 en el que todos los humanos tratemos y establezcamos la unidad, esto es; la toma de decisiones inclusiva y conjunta. El evento consistiría en una Conferencia o Congreso presencial en Madrid de (los mejores) expertos en asuntos relativos a la unidad humana y en una difusión universal, transparente, abierta y completa del mismo.
Si te llega este mensaje, te ruego lo difundas, entiendo que realmente te concierne y te interesa y por ahora solo somos las personas con nuestros limitados recursos el medio de esta convocatoria. Igualmente son bienvenidas tus propuestas o sugerencias sobre opciones de mejora o publicación o difusión del mismo en info@human-unity.org
Con la unidad pretendemos que el actual emprendimiento para el daño (armas, ejércitos) o el daño resulte absurdo o contradictorio (sería dañarse uno a sí mismo) y que la seguridad y el desarrollo sean comunes, compartidos. Con ese entendimiento lógico y según ese propósito, la unión es la voluntad unánime de todas las personas, de este modo cada persona en particular y la humanidad en su conjunto seremos responsables, causa, garantía de la unidad. (Puedes obtener más información de nuestro entendimiento de este proyecto en nuestra página y plantear las dudas que te surjan, por ejemplo al pie de este post)
Durante el congreso nos proponemos establecer un sistema de seguridad y de toma de decisiones para la cooperación para el desarrollo transparente, inclusivo y conjunto y para ello necesitamos un medio fiable y estable de comunicación que facilite la participación de todos sin discriminación por lo que esta es ya una invitación a las empresas o expertos del Grupo de Trabajo de Comunicación del Congreso (ver grupos de Congreso en http://human-unity.org/congreso-universal/) a organizar el evento junto a HUM.
Dado que la audiencia del Congreso es mundial, la exposición de estos medios (como las otras empresas participantes) es también mundial y debería facilitar su acceso a todos los mercados, además de participar en el diseño del futuro de la comunicación y toma de decisiones con nuevos desarrollos multiplicados por la liberación de recursos hasta ahora destinados a fines militares.
En efecto, al finalizar el evento la unión humana debe de haber tomado forma y vigor capaz de mover a los políticos de cada estado a que se coordinen en la unión y cooperación universal y en el desarme (simultáneo, conjunto, acordado, recíproco…) para lo que también se puede formar un equipo de coordinación que facilite y asegure la transparencia, el entendimiento y el acuerdo. El esfuerzo inversor de cada estado en su seguridad o defensa pasa a destinarse a las empresas según las prioridades de desarrollo propuesto por los Grupos de Trabajo del Congreso y los actuales efectivos de los ejércitos a ocuparse de las tareas de desarrollo más urgentes hasta su completa desmovilización (la policía sigue otro proceso).
El impulso de la unidad es humano (no ha de ser difícil lo que es natural), humanitario y no político. Reivindicamos la humanidad, nos negamos al genocidio, algo que no aparece entre las acciones/opciones políticas, y apoyamos la unión sin demora porque no debemos (consentir) causar daño a tantas personas que lo sufren ahora mismo cuando ya lo podemos evitar.
Apoyar la unidad humana equivale a ser parte de todas las partes y sufrir como nuestro el daño que estas se infringen y esta convocatoria reclama la tregua ya allí donde se da conflicto, del tipo que sea, internacional o doméstico, público o privado, aunque convocamos particularmente a las personas de Asia Occidental.
Y es que el origen del conflicto entre los humanos es la ‘legalidad’ de la violencia, a la que todos juntos pondremos fin tan pronto como en otoño de 2020, por lo que no merece ya la pena dañar para tener derecho a ella.
Gracias.